
12 de Junio de 2008
Querido Diario:
Hoy fue un día… sólo un día más… bueno, sí pasaron algunas cosas. Después de clases nos quedamos para hacer la disertación de Naturaleza de Copérnico. Con Verónica fuimos al baño, luego nos sacaron de la sala para hacer clases de piano… o algo así, así que fuimos al comedor. Nos reímos, enojamos y además hicimos el trabajo. Se fue Noel y luego Daniel. Terminamos y salimos del comedor, Vero y yo empezamos a caminar rápido dejando a los otros detrás. Me preguntó si quería ir al baño.
- No –le respondí– ¿Y tú?
- Tampoco –me respondió–.
Había un niño que no era del colegio porque nunca lo había visto. Abrió la puerta para salir y la iba a cerrar, ¡Espera! Le dije y no la cerró, salió como en las películas románticas, Vero dijo que el puso la mano para abrirla, yo creo que la abrió para que nosotras pasáramos, quizá fue caballero. Cuando pasé le dije gracias, pero lo dije tan bajo que apenas me escuché yo misma. Según Vero sí dijo gracias, yo no la escuché. Era bonito, creo que era Pokemon, lo digo por el corte de pelo, pero lo tenía bonito, no lo tenía desordenado, tenía puesto un chaleco blanco y unos jeans, iba con un amigo que a ese se le notaba lo Pokemon, además era feo, –para mi gusto– ¡y el otro niño era guapísimo! Y también caballero.
José Manuel no me gusta, es antipático, hoy estaba en la fila para la leche, pasó por delante de mí y no dijo permiso, estoy muy enojada; yo le dije “permiso se dice”, pero lo hice en un tono fuerte pero a la vez despacio. Para la otra le digo “Se dice permiso”. Estoy indignada, además no lo encuentro lindo. Quién lo diría.
PD: Con la Vero lo paso mejor que con las chiquillas. Me río y juego más. Me alegra haberme alejado de ellas.
Querido Diario:
Hoy fue un día… sólo un día más… bueno, sí pasaron algunas cosas. Después de clases nos quedamos para hacer la disertación de Naturaleza de Copérnico. Con Verónica fuimos al baño, luego nos sacaron de la sala para hacer clases de piano… o algo así, así que fuimos al comedor. Nos reímos, enojamos y además hicimos el trabajo. Se fue Noel y luego Daniel. Terminamos y salimos del comedor, Vero y yo empezamos a caminar rápido dejando a los otros detrás. Me preguntó si quería ir al baño.
- No –le respondí– ¿Y tú?
- Tampoco –me respondió–.
Había un niño que no era del colegio porque nunca lo había visto. Abrió la puerta para salir y la iba a cerrar, ¡Espera! Le dije y no la cerró, salió como en las películas románticas, Vero dijo que el puso la mano para abrirla, yo creo que la abrió para que nosotras pasáramos, quizá fue caballero. Cuando pasé le dije gracias, pero lo dije tan bajo que apenas me escuché yo misma. Según Vero sí dijo gracias, yo no la escuché. Era bonito, creo que era Pokemon, lo digo por el corte de pelo, pero lo tenía bonito, no lo tenía desordenado, tenía puesto un chaleco blanco y unos jeans, iba con un amigo que a ese se le notaba lo Pokemon, además era feo, –para mi gusto– ¡y el otro niño era guapísimo! Y también caballero.
José Manuel no me gusta, es antipático, hoy estaba en la fila para la leche, pasó por delante de mí y no dijo permiso, estoy muy enojada; yo le dije “permiso se dice”, pero lo hice en un tono fuerte pero a la vez despacio. Para la otra le digo “Se dice permiso”. Estoy indignada, además no lo encuentro lindo. Quién lo diría.
PD: Con la Vero lo paso mejor que con las chiquillas. Me río y juego más. Me alegra haberme alejado de ellas.